Battle Angel: La última guerrera, una adaptación justa de un clásico del manga

Analizamos la reciente adaptación cinematográfica de la magna obra de Yukito Kishiro.

Este 14 de febrero llega a los cines Battle Angel: La última guerrera. La esperada adaptación a la gran pantalla del manga de Yukito Kishiro por parte de James Cameron y Robert Rodríguez. Este es un filme del que se espera mucho debido al interés de los productores en la historia original y por lo ambicioso de su producción, misma que incluso es la de mayor presupuesto en la que Rodríguez haya participado.

Hay que decirlo, los meses previos a esta película estuvieron cargados de un cierto escepticismo por parte de los más asiduos fans del manga y el anime, muchos de los cuales conocieron y siguen Battle Angel Alita en sus entregas actuales; podemos decir con agrado que salvo algunos detalles, la película cumple con su propósito de entretener y que es una de las adaptaciones más aceptables que haya hecho Hollywood de una historia salida de un manga japonés, que dicho sea de paso cuenta con la aprobación de Yukito Kishiro.

Visual y auditivamente hablando, Battle Angel: La última guerrera tiene en sus efectos uno de sus puntos más fuertes. Ya que en todo momento se transmite la sensación de estar físicamente en Iron City en un ambiente semi-hostil en que impera la ley del más fuerte con una musicalización muy acorde a cada circunstancia. Un aspecto destacable del filme son sus secuencias de acción, en especial la batalla de Alita contra Grewishka (Makaku en el manga) que a título personal es la mejor adaptada del manga, salvo por los cambios hechos al mencionado villano.

De igual forma son impresionantes la primera secuencia del filme, pues transmite con exactitud el sentimiento de aquellas primeras páginas y la partida de Motorball en la que Alita toma parte para hacer su entrada en la liga, puesto que es una de las secuencias con más acción en toda la película. Aunque siendo sinceros, hubiera estado bien destacar un poco más el importante papel que tiene este deporte en la trama.

Asimismo se da a Zalem un aura de misterio que si bien es parte de los tomos del manga en los que está basada a la historia, cada toma hacia esta ciudad, la última en pie tras los suceos de “La Caída” nos deja con la impresión de querer saber qué hay ahí y por qué tantos personajes buscan llegar algún día a este sitio. Esto nos lleva a otro aspecto muy importante visualmente y es que se representó de manera casi exacta a los personajes principales de la historia, desde Alita, pasando por Ido hasta el villano Desty Nova. El cual es quizá el más parecido al diseño de Yukito Kishiro y que cada aparición suya sugiere una posible segunda parte.

Ahora bien, a fuerza de ser sinceros y aunque en términos generales es una adaptación bastante justa, tuvo demasiados cambios que pudieron sentirse algo forzados pero que talvez se pueden justificar para hacer la cinta apta para todo tipo de público y una introducción interesante a quienes conocen poco este tipo de obras. Sin embargo, no se puede ocultar que quienes conocen a profundidad la historia en la que está basada puede que no queden del todo satisfechos; cabe decir en este aspecto que hubieran sido muy adecuadas varias secuencias más de acción.

En conclusión, estamos ante una película que refleja de manera bastante aceptable y decente el mundo creado por Kishiro en su obra de los años 90s, pero que si eres demasiado rigorista es probable que le encuentres alguna que otra inconsistencia.